Después de una jornada de trabajo normal, de atiborrarme a pasteles y saladitos cortesía de algunos compis que se van (que tristeza, siempre se van los mejores, hay que joderse!) y al final lo hemos rematado con unas cañas, y como siempre hemos cerrado el bar las mismas...alcohólicas.
Me encanta quedarme con ellos de cañas, poner verde a la Jefa, reírnos de cualquier cosa, hablar de temas escatológicos tan tranquilamente, hacer planes...la que vamos a liar en la casa rural jajaja.
El caso que he tenido un buen día, pero ha sido entrar en mi casa, y como si me hubiera poseído algo, me he puesto nerviosa perdiaaaa, como de mala leche, con ganas de gritar a alguien; he empezado a recordar cosas y me he puesto a hablar (gritar) sola por mi casa, y he gritado a alguna por ahí por teléfono; en fin, no soporto la parsimonia, la sangre de horchata, la dejadez, ¿de qué vamos? ¿qué somos? ¿de dónde venimos? bueno esta última no me la he preguntado, voy a empezar a repartir lo que dan: NADA; aunque alguna H***** también daba, y eso que no soy de violencias nennggg.
En fin, decírselo vosotros chicos
Useless
31 oct 2007
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